Dividir una Vivienda en Dos: Pasos y Consideraciones Legales

Tener una casa grande ofrece la comodidad de espacios más amplios y confortables. Sin embargo, en términos de rentabilidad, muchos propietarios de viviendas amplias optan por dividir el inmueble en apartamentos más pequeños. Esta práctica no solo agiliza el proceso de venta, sino que también brinda la oportunidad de generar ingresos adicionales mediante el alquiler de una parte del espacio.

La división de una casa, ya sea por motivos financieros o personales como un divorcio, plantea diversas consideraciones legales y técnicas. Desde Deapi, exploramos los pasos necesarios y la normativa involucrada en este proceso.

¿Cómo dividir una casa ya construida en dos?

El procedimiento para dividir una vivienda puede variar según se trate de un piso o una casa independiente. En el caso de una casa, se puede optar por una división horizontal, creando unidades en diferentes plantas, o una división horizontal tumbada, separando la propiedad verticalmente para crear viviendas adosadas.

El proceso de segregación implica pasos como revisar la normativa pertinente, obtener permisos de la comunidad de propietarios, elaborar un proyecto técnico y formalizar la división mediante escritura pública e inscripción en el Registro de la Propiedad.

1. Revisar la normativa:

Es fundamental consultar la legislación estatal y local que regula este tipo de operaciones inmobiliarias, así como los requisitos de habitabilidad mínima para las nuevas unidades.

2. Solicitar permiso a la comunidad:

Para dividir un piso en un edificio residencial, se requiere el consentimiento de la comunidad de propietarios, con una aprobación previa por mayoría.

3. Elaborar un proyecto técnico:

Un arquitecto debe diseñar un proyecto que cumpla con los estándares de habitabilidad y normativas de construcción, considerando aspectos como la entrada independiente y el aislamiento entre unidades.

4. Elevar la división a escritura pública e inscribirla:

La segregación debe formalizarse mediante escritura pública ante notario y registrarse en el Registro de la Propiedad para establecer la propiedad individual de cada unidad.

¿Qué cambia tras la división?

Una vez completada la segregación, es necesario ajustar aspectos como los impuestos municipales, los suministros y las cuotas de la comunidad, que ahora se aplicarán individualmente a cada vivienda.

En resumen, la división de una casa en dos viviendas puede ser una solución viable, siempre que se cumplan con los requisitos legales y técnicos correspondientes. Además, es importante considerar aspectos como la redistribución de costos y derechos de propiedad, especialmente en casos como la asignación de vivienda a hijos independientes.